Tremenda remontada. Sí, la de Guaraní, que jugando -quizás- uno de sus mejores partidos del campeonato, le ganó 2-1 a Olimpia, metiendo por primera vez dos victorias consecutivas en un torneo Clausura, que siempre le fue complicado.

Para el cuadro de Julio César Cáceres supone un durísimo golpe, porque queda a cuatro puntos del puntero Nacional y se ubica ahora en una incómoda cuarta posición, lo que sin dudas, traerá preocupación, por lo parejo que está resultado el torneo.

Más allá de eso, hay que decir que el triunfo del “Indio” fue merecido, porque más allá de haber encajado el gol franjeado en el primer cuarto de hora, por un penal “evitable”, fue el equipo que mejor hizo las cosas. Concentrado, intenso y con algunos jugadores que mostraron una notable entrega y también calidad.

Olimpia llegó al gol por esa pena máxima, tras la falta de Aldo Pérez sobre Brian Montenegro. Clarísimo penal. De la ejecución se encargó Alejandro Silva, que no perdonó al joven golero aborigen. Aún así, el “Indio” no bajó el ritmo que impuso desde el inicio y tras una falta de Mateo Gamarra sobre Camacho, advertido por el VAR, también tuvo a su favor un penal.

El mismo Camacho se encargó del tiró, pero se remate pegó en el poste para que Olimpia mantenga la diferencia. El “7”, que este año volvió al club tras su paso por el Decano, era el jugador más inquietante en ataque junto a Marcelo González  y redondearía después un gran partido.

Ya en el segundo tiempo, el ingreso de Romeo Benítez, sería determinante en el partido y la gran noticia para Guaraní. El mita’i de 19 años, en la primera pelota que tomó, paseó a media defensa franjeada y su pase al medio, encontró la atropellada de otro de los Benítez del equipo, Ángel, que venció a Aguilar en la boca del arco para poner el 1-1.

La intensidad del partido se notó a fuego en los minutos siguientes, pero el predominio del partido siempre fue del aborigen que logró su premio de un lateral. Tras el mismo, llegó el centro desde la derecha, que Fernando Fernández, conectó de cabeza en forma impecable, anticipándose a Saúl Salcedo y venciendo la resistencia de Alfredo Aguilar, para el 2-1. Golazo. 

Casi inmediatamente después, Aguilar salvaba milagrosamente su arco por dos veces, sendos remates de Romeo, que no aprovechó un contragolpe para liquidar el pleito.

Apenas unos minutos más tarde, Olimpia, que también había hecho cambios, tuvo la más clara para empatar el partido, con dos de ellos. Tras un tumulto en el área franjeada, se inició un contragolpe tremendo con Hugo Fernández, que habilitó al debutante Ronald Cornet. Este, solito, picó largo y permitió la intervención de Pérez. Del rebote, Walter González remató alto, desperciando también la clara ocasión.

En los minutos siguientes se cambiaron los roles. Olimpia atacó con más empuje que orden y buen fútbol y Guaraní, con la calidad de Camacho y la velocidad de Benítez, retrucaba a su manera. Al final, aguantó bien el resultado y se anotó una merecida victoria, que por el momento y el rival que le tocó, le pone un signo de interrogación a la eventual salida de su técnico Fernando Jubero. 

Fuente: www.cronica.com.py